jueves, 31 de marzo de 2011

Insomnio e ideas negras y locas

Hoy no he podido dormir, las ideas danzaban en mi mente como un diablillo brincando en el infierno. Las ideas se agrupaban casi sin sentido, golpeándome en el alma e entorpeciendo mi descanso.

Me hubiera encantado esconderme en la cama, no salir en varios días, desaparecer y bucear en un mundo imaginario donde el dolor y mis demonios no pudieran aparecer en escena. Donde el telón estuviera siempre bajado.

Quiero que desaparezca la sensación en mi estomago que me aprieta tanto que no me deja respirar, que no me deja discernir. Mis demonios se quieren apoderar de la realidad y tengo que luchar con todas mis fuerzas para no dejarlo salir... Pero es la realidad la que atrae a los demonios, la que me oprime el pecho sentándose encima. El ritmo de mi corazón se acelera y no deja de retumbar en mis oídos, un ritmo frenético enloquecedor ..

Mi alrededor no tiene el mismo color, sabor…

No sé cuál es la salvación.

“Las lágrimas más amargas que se derraman sobre nuestras tumbas son por las palabras nunca dichas y las obras inacabadas” (Harriet Beecher Stow)

Un mal dia

Tengo sed de muchas cosas, mi espíritu necesita darse a conocer. Cada día me encuentro atrapada en un ambiente de números y ordenadores, de llamadas indeseables, de orgullo tragado, recibos, transferencias, avales, facturas.

¡Necesito mas ¡ ¡no quiero pensar que todo sea esto.!

Quiero realizar mis propios proyectos, con mis propios errores, realizar algo por mí misma. Las cadenas me tienen atrapada a una mesa rebosante de papeles, donde las letras empiezan a bailar junto a número sin sentido, al ritmo del teléfono y el fax.
El reloj ha empezado la cuenta atrás, mi energía está saturada y desmotivada por el día a día. El sol no brilla de la misma manera y las manillas de reloj me taladran dando la hora del final.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Caminos


Nunca habéis pensado que sería vuestra vida si hubieras tomado otras decisiones durante el camino, yo a menudo.
Durante nuestra vida el camino va tomando diferentes bifurcaciones y está en nuestras manos decidir por cual caminar. Las decisiones no siempre son fáciles  y a veces por falta de valentía escogemos, no el que se mas fácil, sino el que representa que debemos tomar.
La individualidad del ser humano está muriendo, todos nos intentamos incluir en distintos niveles sociales donde querríamos estar, y actuamos según las directrices de dicho nivel social. La persona que es diferente es atacada, ya no valoramos lo autentico.
Todos nos vemos influenciados por lo que se espera de nosotros, por las normas sociales. Tanto la sociedad como la gente que nos envuelve consiguen que la máscara que llevamos al final esté tan adherida a nosotros que en ocasiones dudemos de donde empieza o acaba esta mascara.

"Todos llevamos máscaras, y llega un momento en el que no podemos quitárnoslas sin quitarnos nuestra propia piel." (Andre Berthiaume)